LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS EN LA EDUCACIÓN
INTRODUCCIÓN
Todas la actividades realizadas en la vida diaria, es audiovisual. Lo audiovisual, a través de cada uno de sus medios y soportes específicos, se ha convertido en la literatura de nuestros tiempos.
La comunicación audiovisual, vinculada de manera sencilla con nuestro día a día, y de manera profunda con los saberes humanísticos más interesantes de la historia del conocimiento, que van desde la Retórica de Aristóteles hasta la perspectiva Semiótica o la Antropología. De todo ese conjunto de conocimientos, tan apasionante como difícil de aprehender, considero prioritario centrarme en la necesaria “confusión” de comunicación y pedagogía, rescatando un término tradicional en la enseñanza para una ciudadanía crítica, como es la Educación Audiovisual (Masterman, 1999).
NUESTRO DÍA A DÍA “AUDIOVISUAL”
Nos comunicamos mediante mensajes a través de nuestro teléfono móvil, chateamos y compartimos nuestra experiencia vital en un blog, disfrutamos visualmente con un cartel publicitario, comprendemos nuestro entorno a través de la identificación con los valores y personajes de nuestras series y películas favoritas de ficción, jugamos una partida en la PlayStation.
El lenguaje audiovisual se basa en un acto de representación y, por ello, los mensajes que se registran y difunden a través de los medios audiovisuales no son la realidad, sino producciones que se asemejan tanto a esa realidad que llegan a confundirse con ella.
Todas las manifestaciones sociales y colectivas tienen el tono, la forma y el contenido que definen previamente los medios de comunicación social. Lo audiovisual, siendo sólo una apariencia, produce y transforma la realidad. En terminología del pensador Lyotard (1987), la televisión produce una gran Metanarrativa. No olvidemos que lo audiovisual es un elemento socializador de primer orden que, a fuerza de repetición de estereotipos visuales, hace que sea la propia realidad la concienciada, y no a la inversa (Ramonet, 2006). En terminología de Roland Barthes (1980) hablaríamos de la confusión con la hiperrealidad que construye el audiovisual. En definitiva, casi podría decirse que es la realidad la que imita a la televisión.
Mientras tanto, un incansable consumo audiovisual marca nuestras pautas culturales y de ocio, con una especial incidencia en aquellas generaciones que aprendieron a concebir la vida a través de la pantalla. Menos cultura implica una menor capacidad crítica ante esos estímulos, y esa situación continúa generando corrientes apocalípticas que rechazan los medios audiovisuales en el siglo XXI de la misma forma que se enfrentaban al nacimiento del cine como arte a principios del siglo XX.
Lo audiovisual como medio para comprender el mundo. Frente a las posturas moralizantes, preocupadas por la influencia manipuladora de los medios audiovisuales, propongo aprovechar el imparable fenómeno audiovisual para comprender, precisamente, el tipo de sociedad que genera esos contenidos, en un esfuerzo desde la educación formal y no formal para construir una ciudadanía más crítica
Los mensajes audiovisuales, considerándolos también como un documento antropológico que nos ayuda a entender la sociedad que genera esos mensajes.
En la actualidad, numerosos autores y autoras de todo el mundo confluyen en un gran puzzle de pensamientos e ideas que dirigen todas las visiones a la televisión en concreto y al ámbito audiovisual en general, considerándolo un factor estrechamente vinculado a la educación. Hago referencia a algunos de estos trabajos en la bibliografía para las personas interesadas en el estudio del la Educación Audiovisual.
Desde mi punto de vista, es necesario apostar por la integración de lo mejor de cada una de esas corrientes teóricas, en esa necesaria confusión5 de pedagogía y comunicación que otorgue un sentido real y humano a la actividad docente, pero también al día a día de los medios de comunicación. El camino y la solución pasan por un trabajo interdisciplinar.
NUESTROS OBJETIVOS EN LA EDUCACIÓN AUDIOVISUAL
Metas principales de la Educación Audiovisual:
*Enseñar a diferenciar la representación audiovisual de la realidad.
*Enseñar a desmitificar.
*Fomentar la comprensión crítica del entorno audiovisual, del mundo.
*Convertir lo audiovisual en un medio para la expresión.
*Crear una ciudadanía crítica y un mundo mejor.
En resumen: desarrollar la capacidad de inferir significados y contextualizar los mensajes, también tenemos que usar lo audiovisual como un vehículo para expresar nuestra interioridad y disfrutar a nivel estético.
Es necesario dejar claras dos cuestiones fundamentales:
1.- Superar posturas negativas, apocalípticas y paralizantes que siempre encuentran en las producciones audiovisuales motivo de influencia perniciosa en la conducta de la audiencia, sobre todo por parte de padres y docentes. Es mejor dirigir el debate hacia una propuesta de soluciones pedagógicas.
Comprender y disfrutar esas producciones audiovisuales es el mejor modo de disminuir ese efecto perturbador y alienante.
2.- En segundo lugar utilizar el término educación desde un sentido amplio haciendo referencia a cada una de las manifestaciones pedagógicas que puede tener la enseñanza de los medios.
Aplicar los objetivos anteriores a la enseñanza profesional y universitaria en el terreno específico de la Comunicación Audiovisual, que se le supone a un futuro profesional de la televisión, el cine, Internet o cualquier medio de comunicación.
Se trata de fomentar una comprensión crítica de lo audiovisual, Lo importante es entender que hay que enseñar lenguaje audiovisual y comunicativo en general. Dotar a la ciudadanía de unas herramientas de análisis crítico de la comunicación.
Estas líneas marcan el camino para mezclar pedagogía y comunicación.
BASES DE LA RELACIÓN COMUNICACIÓN/EDUCACIÓN
Existen algunas referencias destacadas en la aproximación de ambas materias. Sin embargo, sigue siendo necesario y urgente hacer creíble la importancia de la vinculación entre Pedagogía y Comunicación.
Hoy día es una realidad indiscutible el papel socializador y la influencia de los medios de comunicación en el proceso educativo. La educación no es un tema prioritario para los medios de comunicación.
No existe una cultura de creación de producciones audiovisuales educativas, a los medios no les gusta hablar de sí mismos.
El comentario sobre la propia actividad periodística o, en su caso, audiovisual, es algo que suele quedar en la cocina de las empresas que generan contenidos.
La nueva televisión temática y digital irá demostrando en los próximos años que este tipo de programas tienen un público fiel por el que merece la pena trabajar.
La noticia política no deja tiempo ni espacio para la educación. Y menos aún para la educación en medios.
PROPUESTAS PARA LA EDUCACIÓN AUDIOVISUAL
Pautas consideradas necesarias para promover actitud crítica y comprensión del entorno audiovisual y de la propia sociedad. Dos importantes líneas de actuación que son:
A) Priorizar la educación para una ciudadanía crítica en la enseñanza generalista:
Abordar el análisis y enseñanza crítica de series, videojuegos y producciones audiovisuales cercanas a los jóvenes. Hacerla significativa y cercana.
Incluir con decisión la comunicación audiovisual en los planes de estudios, superando su actual y etéreo estado de transversalidad. El saber mediático y audiovisual sí debe ocupar lugar en el currículum de primaria y secundaria.
Entrar en la Escuela.
Repensar el sistema y los roles profesor alumno
Rescatar de la enseñanza tradicional lo más primordial
Perder el miedo a utilizar los medios audiovisuales como recurso didáctico
Asumir que, más allá de las destrezas tecnológicas, lo audiovisual es un campo de estudio humanístico
Ampliar esa inquietud por la comunicación a la educación no formal. La enseñanza es una actividad permanente y, si se hace bien, emancipadora (Freire, 1969)
Ejemplo: La serie KYLE XY o HÉROES son, en sí mismas, tratados de filosofía. El análisis de sus acciones, personajes, planificación, recursos puede llevarnos a comprender el lenguaje audiovisual, pero también a entender por qué existe la figura del súper-hombre y qué relación tiene con la permanente fabricación de mitos dirigidos a adolescentes. Conseguiríamos que el joven disfrutara y comprendiera mejor sus propias series favoritas. Así, no sólo reflexionamos sobre el mundo, sino sobre nosotros mismos y nuestra propia identidad.
B) Incluir la preocupación pedagógica en el día a día de las facultades y centros de formación profesional relacionados con los medios de comunicación:
El ámbito de la comunicación social, desde el punto de vista profesional y docente, debería interesarse en mayor medida por la educación. Las propias facultades y escuelas de capacitación profesional vinculadas al sector audiovisual deberían abanderar iniciativas de este tipo. Por un lado, mejoraría la formación integral de sus estudiantes; por otro, el colectivo docente podría implicarse a través de campañas pedagógicas para comprender los medios
El ámbito teórico-académico de la Comunicación Audiovisual debe llegar más y mejor a las personas, saliendo de sus actuales círculos, semióticos o culturales, que son demasiado elitistas.
Potenciar la investigación y acción centrada en el valor formativo de los medios.
Cualquier productor de contenidos audiovisuales debe ser previamente un analista.
Fomentar la creatividad de forma paralela al análisis, en su sentido más profundo y vinculado al placer estético y ético que comporta la comunicación. Nunca se debe huir del placer, hay que explorarlo como base creativa
Conseguir que, en un futuro, exista más concienciación por el ámbito educativo en las plantillas de los medios de comunicación
Trabajar para que se incluya lo audiovisual en las próximas propuestas legislativas, en un momento en el que la educación está transformando profundamente sus estructuras.
Hasta ahora, las referencias se basan en el tratamiento transversal.
Ejemplo: Talleres de educación en medios o de análisis y comentario audiovisual dirigidos a públicos no especializados mejorarían el conocimiento de las propias facultades de comunicación y de su actividad académica, mejorando su relación y reconocimiento en la sociedad actual. (Si alguien duda sobre esta necesidad, debería hacer una encuesta en alguna calle céntrica y preguntar a los ciudadanos que por allí pasen qué estudian o a qué se dedican los “comunicadores audiovisuales”)
Incluir con criterio pedagógico la comunicación en el ámbito educativo y, por otra parte, ser capaces de hacer visible el contenido y la riqueza de la comunicación a la ciudadanía. Dos maneras intencionadas, para confundir pedagogía y comunicación. Dar un sentido a nuestra actividad, que debe estar siempre dirigido a comprender el mundo para transformarlo.
CONCLUSIONES
1) La comunicación audiovisual es una realidad omnipresente en nuestro día a día, que condiciona nuestra percepción de la realidad. Hay quien afirma que lo audiovisual “crea” la propia realidad.
2) No debemos perder de vista que se trata de un proceso de representación, enseñando a diferenciar entre un mensaje audiovisual y la propia realidad.
3) Los medios de comunicación audiovisual están experimentando una transformación profunda en el inicio del siglo XXI. El nuevo sistema de comunicación se fundamenta en la interactividad.
4) Son comprensibles las posturas moralistas centradas en la preocupación por la influencia de los medios audiovisuales en la conducta de las personas, sobre todo de los jóvenes. Sin embargo, esa actitud no crea sino distancia con respecto a la realidad audiovisual.
5) Frente a esa visión, fomentar una Educación Audiovisual que potencie la capacidad crítica de toda la ciudadanía, basada en la comprensión y el placer ante lo audiovisual como medio de expresión.
6) Es necesario comprender y disfrutar las producciones audiovisuales, investigando sus posibilidades para nuestra base creativa.
7) El adiestramiento tecnológico debe ser sólo una parte de la Educación Audiovisual, que complementa a una enseñanza humanística, basada en la reflexión.
8) Series de T.V, videojuegos, etc. son un documento antropológico de una cultura y una época determinada. Al comprenderlas nos estamos situando en el mundo actual.
9) En el análisis y la didáctica audiovisual hay que recorrer un interesante camino interdisciplinar, desde la semiótica hasta la narrativa, para profundizar en esa “Cultura Audiovisual”.
10) Comunicación y Educación son dos campos de conocimiento y actividad profesional que deben dialogar de manera más intensa para conseguir esa Educación Audiovisual.
11) Dos líneas de acción pueden favorecer la consecución de esos objetivos. Por un lado, incluir la comunicación audiovisual en los programas de educación generalista. Por otro, favorecer la preocupación pedagógica de docentes y profesionales de los medios de comunicación
12) La pedagogía otorga un sentido último, humaniza y hace comprensibles los mensajes de los medios de comunicación social.
13) Docentes y profesionales de los medios de comunicación no deben perpetuar valores de conservación de las desigualdades, sino perseguir la transformación y mejora de nuestra sociedad a través de su actividad.
BIBLIOGRAFÍA:
Marfil Carmona, Rafael. “Estrategias para la educación audiovisual”. En: Cuadernos de Comunicación, 2008, nº. 2, pp. 78-92. ISSN: 1988-3153.